Lawrence de Arabia (Lawrence of Arabia)

A finales de la 1ª Guerra Mundial, un teniente con un carácter muy especial, Peter O’Toole (Stardust, Troya) del ejército británico y experto en el mundo árabe destinado en El Cairo, es enviado a Arabia para luchar junto al pueblo árabe contra los turcos. Lo que empieza como una formalidad para el ejército británico, se convertirá en el alzamiento de todas las tribus árabes.

¡Peliculón!, la he visto la tira de veces y esta vez tocó en HD con un metraje de unos 220 minutitos del ala.

Al que le guste el cine por la fotografía no se puede perder esta maravilla, menudos paisajes que rodó David Lean, una gozada para la vista y es de 1962, ¡casi nada!.

Por no hablar de la genial banda sonora, dejando a un lado al maestro John Williams, antes sí que se hacían bandas sonoras que todavía hoy en día te acuerdas de ellas. Porque todas las superproducciones que se hacen ahora, sí las pelis son la hostia, pero ¿y la música, alguien se acuerda de alguna?, yo desde luego no.

Algo que siempre me sorprendió de esta superproducción, es que se arriesgasen a hacerla con un protagonista que hacía su estreno en cine. Hay que tenerlos muy bien puestos para arriesgarse de esa manera, aunque viendo el resultado seguro que lo tenían calculado porque menudo pedazo de interpretación que hizo Peter.

Para los más jóvenes y que todavía no la hayan visto, decirles que aunque es un peliculón no tiene la acción y el ritmo de las pelis de ahora, es más, a veces es bastante lenta y en algunas escenas en el desierto el director se recrea demasiado con las imágenes. Aunque hay que decir que con ese disfrute del director hace que sientas el desierto casi como lo sienten los protagonistas.

Acompañando en el papelón de Peter, tampoco se quedan atrás Omar Sharif (Top secret) y Anthony Quinn (El último gran héroe). En el resto del reparto están Alec Guinness, Jack Hawkins, José Ferrer, Anthony Quayle, Claude Rains y Arthur Kennedy, entre los más famosos.

Hay una escena que me marcó de esta peli y que me demostró que el destino existe, que es cuando va a intentar salvar a un compañero en el desierto; ya puedes hacer lo que quieras que como esté para ti no hay nada que hacer por mucho que insistas.

Por supuestísimo…

Vayan a vela!

Ciao!