Vuelve el día de la purga y todo el mundo se prepara, unos para quedarse encerrados a cal y canto en casa y los otros para salir y matar. Uno de los que salen, Frank Grillo (Beyond Skyline, Sin tregua) tiene un sólo objetivo, pero por el camino se ve obligado a salvar a una mujer, Carmen Ejogo (Roman J. Israel Esq., En la mente del asesino) y a su hija.
Aquí estamos para hablaros de la segunda entrega de esta saga, dirigida otra vez por James DeMonaco en 2014.
Bueno, pues no es que hiciese falta mucho para mejorar The Purge: La noche de las bestias pero tengo que reconocer que me gustó más.
Si dejamos a un lado la parida de la purga y aunque la subtrama sea otra historia de supervivencia, no está mal, está entretenida y como digo muchas veces, que no es poco.
El Frank es un actor que me gusta, no sé, tiene ese algo que me cae bien, y ahora todavía más, porque después de haber visto esta secuela y la secuela de los extraterrestres que hizo, mejorándolas y comparándolas con sus predecesoras, pues que la próxima 2ª parte que vuelva a hacer de una peli, tengo por seguro que la veré.
La hija de la prota es Zöe Soul, la pareja está interpretada por Zach Gilford y Kiele Sanchez, en pequeños papeles John Beasley como el abuelo, Noel Gugliemi es el vecino, la compañera de la prota es Justina Machado, el asesino del camión es Jack Conley y el líder revolucionario es Michael Kenneth Williams.
Un detalle que saliese uno de los actores de la primera, concretamente Edwin Hodge.
Si no hay nada mejor, no es mala opción.
Ciao!