Hasta el último hombre (Hacksaw Ridge)

Hasta el último hombreEn plena 2ª Guerra Mundial, un joven de un pequeño pueblo del interior de los Estados Unidos, Andrew Garfield (The Amazing Spider-Man 2: El poder de Electro) se alista para ayudar a su país. Todo parece ir de lo más normal hasta que llega al campamento y su sargento, Vince Vaughn (Doble o nada) les dice que cojan un arma. El joven se niega, ya que cuando se alistó ya había avisado de que era objetor de conciencia, pero resulta que su sargento y su capitán, Sam Worthington (La guerra de Hart) no entienden como alguien que va a la guerra vaya sin un arma. La guerra para el joven empezará antes de lo que él pensaba…

¡Peliculón!, el que me haya leído alguna vez sabe que le doy mucha cera a los entendidos por sus gustos tan «particulares», pero hoy hay que reconocer que compartimos el mismo.

¡Y no me extraña!, porque esta película dirigida por el pedazo de director que es Mel Gibson (Braveheart, Apocalypto) da gusto verla. Y esto es una paradoja, porque hay escenas tan crudas que son para apartar la vista.

163621Si habéis visto la Obra Maestra de Salvar al soldado Ryan y os impresionaron tanto como a mí las escenas bélicas, pues aquí tenéis una nueva dosis, con igual crudeza y si me apuráis un poco más.

corazonesHace algo más de dos años cuando colgué la película Corazones de acero, comentaba que tenían que hacer más películas sobre esta guerra, porque historias tienen para dar y tomar. Bien, pues alguien debió pensar lo mismo que hicieron esta gran película.

Pero es que lo mejor de todo es que está basada en hechos reales. Os puedo decir que me gusta mucho el tema de la 2ª Guerra Mundial y no había oído hablar de este pedazo de hombre, Desmond Doss.

Cuando la veáis, no sé si llegaréis a creer en superhéroes o que hay alguien ahí arriba, pero os puedo asegurar que al menos os entrará la duda, porque lo que hizo este pedazo de hombre… bueno, mejor lo veis para creerlo.

Haciendo de padres del prota, Hugo Weaving y Rachel Griffiths, la novia es la hermosa Teresa Palmer. El compañero del campamento que no para de tocarle las narices es Luke Bracey.

Vayan a vela!

Ciao!