Después de vencer al demonio y perder medio brazo, Ash, Bruce Campbell (Oz, un mundo de fantasía, Spiderman), en venganza es enviado por el diablo a la Edad Media. Allí mostrará al pueblo ignorante de aquella época, lo que puede hacer una moto-sierra y un buen rifle. Su único propósito es volver al siglo XX, para ello tendrá que recuperar el libro del Necronomicón.
Una peli del año 1992 dirigida por Sam Raimi, que recordaba como muy simpática pero que el tiempo no ha tratado nada bien.
Evidentemente esta película era para lo que era, puro entretenimiento de aquel tiempo, pero que hoy en día se puede decir que es una gafada de las buenas, por no llamarle parida.
Aunque tengo que reconocer que tiene algún momento simpático y uno que todavía es realmente memorable, cuando tiene que citar las tres palabras.
Para el que no lo sepa esta es la tercera entrega de «Posesión infernal» y si alguien ha visto alguna peli del director, por ejemplo las citadas arriba de Bruce, comprobará que en la mayoría sale su querido amigo Campbell.
En el reparto, poca cosa, la mujer de la peli es Embeth Davidtz (Europa One, Emperor’s Club), el mago está interpretado por Ian Abercombie, los caballeros son Richard Grove y Marcus Gilbert.
Ciao!