Ocho apellidos vascos

Un sevillano de pura cepa, Dani Rovira (Superlópez), conoce a una vasca nacionalista, Clara Lago (Fin, La cara oculta) de la que parece estar enamorado en la única noche que pasan juntos. Ella sin previo aviso regresa a las vascongadas y él irá tras ella para ver si ese sentimiento que tiene es amor. Al principio ella no se interesa por él, pero cuando llega el padre de ella, Karra Elejalde (Invasor) le pedirá que se haga pasar por su novio vasco… de toda la vida.

Tenía ganas de verla por el exitazo tan enorme que tuvo, aunque tenía mis dudas sobre ella.

Bien, pues está entretenida y simpática, con algún momento bueno pero… nada más. Para mi gusto no es una maravilla como oí decir por ahí, ni muchísimo menos.

Muchos de los tópicos que salen sobre los vascos, ya los había visto en la también simpática serie vasca «Vaya semanita» de la cual hay algún actor que está en esta peli. En esta serie ya se vacilan bastante los propios vascos, por lo que en consecuencia no me hicieron mucha gracia la mayoría de los chistes que hacen los protas en la peli.

Que ayer se me olvidó. No me hizo tanta gracia también debido a que no deja de ser una versión cañí de la genial peli francesa Bienvenidos al norte y si ese no me llegara, posteriormente los italianos hicieron la misma, clavadita, titulada «Bienvenidos al sur».

El que hace un buen papel es Karra, el tío lo borda. La que se hace pasar por madre del prota es Carmen Machi (Los amantes pasajeros). El camarero y amigo del prota está interpretado por Alfonso Sánchez.

Entonces, ¿por qué tiene tanto éxito esta peli?, primero y esencial, porque para gustos colores; segundo la gente tiene unas ganas locas de reírse y más como está el país y tercero, porque viendo el cine español que se hace en general, a la mínima que se haga algo decente (y esta lo es) la peña va en masa.

Ciao!