Un agente de la DEA, Jason Statham (Death Race: La carrera de la muerte, En el nombre del rey) después de capturar a un narco y ver como éste vio morir a su hijo, se retira a un pequeño pueblo tranquilo. Todo va perfecto en su vida, hasta que un día su hija defendiéndose golpea a un niño y la madre del pequeño, Kate Bosworth (El camino del guerrero) quiere venganza.
No está mal, no es que se vea nada nuevo sobre un tipo que tiene que defenderse de los garrulos del pueblo, pero sí en la manera de repartir hostias.
Las escenas están genialmente realizadas, a mí hasta me dolía cuando Jason repartía estopa. Viene a ser un Transporter pero llevado a la América profunda.
La que hace un buen papel es Kate, ¡la madre que la parió, a ella sí que dan ganas de hacerla callar!. Si alguien la conoce que le diga que coma un poquito más porque está en los puñeteros huesos.
Haciendo de hermano de la prota y es quién le va a tocar los huevos a Jason, el bueno de James Franco. Por cierto la escena de cuando encuentra el expediente, quizá un poco rebuscada de más, entre tanta caja no sé yo…, además ¿qué hacía Jason con todo eso en casa, no debería estar en la DEA?.
El poli del pueblo es Clancy Brown, la novia de James está interpretada por Winona Ryder, el colega de Jason es Omar Benson Miller, la profe Rachelle Lefevre y el motero Frank Grillo.
En mis tiempos mozos, en este tipo de pelis los problemas se arreglaban a tiros (Clint Eastwood, Charles Bronson, Sylvester Stallone…), ahora con gente como Jason la mayoría de ellos se arreglan con un buen par de hostias.
Yo voy a seguir insistiendo, lo que tiene que cambiar en el mundo del cine es que si te inflan a hostias la cara no la puedes tener como la de una modelo, y aquí siguen fallando.
De todas maneras, si no veis nada mejor en el videoclub pillar esta.
Ciao!
El cine de Rickydepor 